Castración química y obligatoria para los delincuentes sexuales más graves: el plan del gobierno británico

La mayor autoridad judicial británica, la Lord Chancellor y secretaria de justicia, Shabana Mahmood, considera la castración química para los delincuentes sexuales más graves y podría volverse obligatoria. Así lo propuso en la Cámara de los Comunes este jueves.

Mahmood lo está considerando para los delincuentes sexuales más graves. Incluye el uso de fármacos supresores de la lívido en Gales e Inglaterra.

La secretaria de justicia es hija de la inmigración de la Cachemira paquistaní y creció en Arabia Saudita junto a su familia, antes de llegar a Gran Bretaña.

Los pedófilos se enfrentarán a la castración química obligatoria, si su proyecto progresa. Asesinos, violadores y otros delincuentes peligrosos serán liberados tras cumplir solo la mitad de sus condenas, en virtud de la mayor reforma legislativa en 30 años.

Shabana Mahmood ha anunciado que considerará reformar las antiguas leyes médicas, que exigen el consentimiento de la persona para administrar un tratamiento, con el fin de explorar la posibilidad de obligar a los delincuentes sexuales a consumir fármacos para suprimir su libido.

Los jueces tendrán la facultad de castigar a los delincuentes de menor nivel con prohibiciones de viajar, conducir, asistir a partidos de fútbol o usar las redes sociales, incluso por delitos no relacionados, para «darles una paliza».

Las penas de prisión inferiores a 12 meses se aplicarán solo en circunstancias excepcionales. En su lugar, los delincuentes serán castigados mediante una ampliación de las penas comunitarias. Los delincuentes extranjeros serán deportados, tras cumplir solo el 30% de sus condenas, lo que les permitirá reincorporarse a las comunidades de sus países de origen.

Estos son algunos de los numerosos cambios radicales que Mahmood ha anunciado, tras las recomendaciones formuladas en una revisión exhaustiva de las sentencias realizada por David Gauke, exsecretario de Justicia conservador.

Su revisión de 192 páginas ofrece un plan para poner fin a la crisis penitenciaria y reducir la reincidencia y las tasas generales de delincuencia.

Alemania, Dinamarca y el Reino Unido lo han utilizado en hombres que se ofrecen voluntariamente para recibir el tratamiento de castración. Pero nunca ha sido obligatoria.

La secretaria de Justicia respalda reformas radicales en las sentencias. La decisión está vinculada a la super población carcelaria en el reino y la necesidad de reducir la cantidad de detenidos.

El departamento de la ministra planea expandir un programa piloto a 20 regiones como parte de un paquete de medidas radicales para liberar a miles de presos y reducir la sobrepoblación carcelaria en Inglaterra y Gales.

Además de liberar y poner tobilleras a asesinos y violadores tras cumplir la mitad de su condena, Mahmood está considerando las conclusiones de una revisión independiente de sentencias. También ha solicitado al gobierno que cree una base de evidencia sobre fármacos que «suprimen la libido» o reducen los «pensamientos sexuales».

Estas se encuentran entre las 48 recomendaciones presentadas por David Gauke, presidente de la revisión.

Mahmood habló en la Cámara de los Comunes para explicar las medidas que aceptará, en una reforma integral de la justicia penal.

Fuentes gubernamentales indicaron que se espera que acepte las medidas clave de la revisión, incluyendo que los presos con buen comportamiento sean liberados con tobillera, tras cumplir un tercio de sus condenas. Han conseguido que el tesoro financie 30.000 tobilleras electrónicas.

También ha aceptado que quienes hayan cometido delitos sexuales o violentos graves puedan ser liberados para cumplir su condena en la comunidad, tras cumplir la mitad de su condena.

El informe insta a los ministros a crear una base de evidencia exhaustiva sobre el uso de supresores químicos para delincuentes sexuales y a examinar los resultados de programas similares en Alemania, Dinamarca y Polonia.

“La excitación y la preocupación sexual problemáticas pueden reducirse mediante supresores químicos y otros medicamentos, que pueden recetarse a personas que han cometido un delito sexual en determinadas circunstancias”, señala el informe.

Existe un programa piloto de 2022 en prisiones del suroeste de Inglaterra, que utiliza fármacos supresores de la libido, y finalizará el próximo año. Recomienda “continuar financiando los servicios en esta área”.

El gobierno planea expandir el programa piloto, utilizando estos como punto de partida, hasta una implementación completa a nivel nacional, según una fuente cercana a Mahmood.

El enfoque se implementa mediante dos fármacos. Los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) limitan los pensamientos sexuales invasivos. Los antiandrógenos reducen la producción de testosterona y limitan la libido.

Estos fármacos se administran junto con el trabajo psiquiátrico, que aborda otras causas de los delitos sexuales, como el deseo de poder y control.

Mahmood está explorando si la castración química podría ser obligatoria, en lugar de voluntaria, para los delincuentes más graves.

Los delitos sexuales representaban el 21% de los adultos que cumplían penas de prisión inmediata a finales de marzo de 2025. El informe señala que la participación en cualquier programa de este tipo sería voluntaria en Inglaterra y Gales.

La castración química se ha utilizado en agresores sexuales en varios países durante muchos años, con cierto éxito. Pero sigue siendo controvertida.

El principio del tratamiento, cuando se aplica en hombres, consiste en inhibir la acción de la hormona sexual testosterona. La expectativa es que el delincuente tiene menos fantasías sexuales y un menor deseo sexual.

Muchos de estos medicamentos se utilizan más ampliamente para tratar el cáncer de próstata, donde reducen el crecimiento de tumores sensibles a las hormonas. Sin embargo, varían en su eficacia para tratar a los agresores sexuales y en su rapidez de acción.

En Estocolmo, Suecia, están analizando un medicamento llamado degarelix. Los fármacos también pueden tener efectos secundarios, como el desarrollo de tejido mamario en los hombres, depresión y sofocones.

Algunos criminólogos cuestionan si las menores tasas de reincidencia se deben realmente al tratamiento.

Es posible que los hombres a los que se les ofrece una pena de prisión más corta, a cambio de tomar un fármaco para suprimir la testosterona, simplemente estén motivados para no regresar a la cárcel.

En Gran Bretaña hay un serio problema de pedofilia y sus protagonistas esconden su identidad y sus actividades. El número de británicos con interés sexual en menores podría ser siete veces mayor de lo que se creía, dijo la Agencia Nacional contra el Crimen.

En el 2019 se encontraron 144.000 cuentas de pedófilos británicos en sitios pedófilos de la “dark web” de Internet. Todo parece indicar que el número es mucho mayor de lo que la policía y el gobierno habían imaginado.